Una medida de fuerza confirmada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) paralizó por completo el servicio de colectivos de corta y media distancia en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) a partir de las 00 horas de este martes y hasta la medianoche. La drástica decisión, tomada tras el fracaso de las negociaciones salariales con las cámaras empresarias, afectará directamente a miles de vecinos de Quilmes.

En Quilmes, el impacto del paro será inmediato y generalizado. Líneas vitales para la conectividad de la ciudad y la región, como la 148 (Florencio Varela, Quilmes, Constitución), la 159 (Berazategui, Quilmes, CABA) y la 300 (Quilmes – Bernal), dejarán de circular por completo. A estas se suman otras líneas con fuerte presencia en el distrito, incluyendo la 219 (Varela – Berazategui) que también conecta con Quilmes, la 338 (La Plata – CABA) que atraviesa la ciudad, y las líneas 406 (barrios de Berazategui) que prestan servicio en zonas limítrofes.

La medida de fuerza también afectará a líneas que, si bien tienen recorridos principales en otras localidades, son utilizadas por vecinos de Quilmes para sus traslados, como las líneas internas de Florencio Varela 372 y 383, los servicios locales de Varela (Línea 500) y las líneas 603 y 619 que operan entre Varela y Berazategui, impactando indirectamente en las conexiones de los quilmeños. La línea 620 (Florencio Varela – Capital), utilizada por algunos vecinos para llegar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, también se verá interrumpida.